El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil ha decidido este viernes inhabilitar al presidente Jair Bolsonaro por ocho años, a partir de 2023, por haber cometido abuso de poder económico y uso indebido de los medios de comunicación durante la campaña electoral de 2018.
Según la sentencia del TSE, Bolsonaro se benefició de la difusión masiva de mensajes falsos y ofensivos contra sus adversarios políticos a través de WhatsApp, una plataforma de mensajería propiedad de Facebook. Además, el tribunal consideró que el mandatario recibió donaciones ilegales de empresas que financiaron la producción y distribución de esos contenidos.
La decisión del TSE, que contó con el voto unánime de los siete magistrados que lo integran, implica que Bolsonaro no podrá presentarse cargo público hasta 2031. El presidente todavía puede recurrir la sentencia ante el Tribunal Supremo Federal (TSF), pero los expertos consideran que tiene pocas posibilidades de revertir el fallo.
Bolsonaro ha reaccionado con indignación y ha acusado al TSE de ser parte de una “conspiración” para impedir su continuidad en el poder. El líder ultraderechista ha afirmado que no aceptará una “sentencia política” y ha amenazado con convocar movilizaciones populares en su defensa. Asimismo, ha reiterado sus ataques contra el sistema electoral brasileño, al que ha calificado de “fraudulento” y “manipulado”.